PRESENTACION...
El Proyecto Educativo Institucional se sitúa en los cambios del mundo global y reconoce la urgencia de conocer la dinámica que les es propia, para comprender la esencia de los fenómenos sociales, políticos, económicos y culturales.
La formación se da en la tensión permanente entre la individualidad y la masificación, lo particular y lo global, lo intrascendente y lo trascendente, constituyendo así el escenario en los que se sucede la historia de las personas y de los grupos.
Es urgente recuperar la verdad sobre el ser humano, la persona y su proyecto: es la prioridad. Recuperar el verdadero sentido de la Humanidad es el reto que se le al Estado, la Familia y la Escuela llamados a aportar a la reconstrucción del tejido social.
La educación, mediada por la escuela, asume la tarea de la formación de los niños y niñas, de los y las jóvenes asumiendo los valores: honestidad, respeto por la vida, justicia, igualdad, tolerancia, y solidaridad. En este sentido la educación procurará las herramientas del conocimiento, de la formación para la ciudadanía y del la responsabilidad con el medio ambiente necesarias para recuperar un lugar digno en la sociedad y activo en la historia.
El horizonte institucional de nuestro Proyecto Educativo, con referentes teóricos del orden Socio Humanístico Problematizante, asume la persona como centro de la formación; el enfoque Etnoeducativo la compromete en la dinámica permanente del reconocimiento y valoración de la cultura y la formación de los jóvenes maestros, nos reta a dar cuenta del cumplimiento de los Fines de la Educación en Colombia como lo señala la Constitución Colombiana.
“LA FORMACIÓN PEDAGÓGICA EN INTERACCIÓN CON LA COMUNIDAD, HACIA LA INTERCULTURALIDAD”, nombre del Proyecto Institucional, señala una finalidad en la que los factores constitutivos determinan una dinámica propia que constituye la razón de ser de la Escuela Normal Superior. Se trata de la educación a través de la acción directa en el ámbito de las comunidades pluriétnicas y multiculturales.
Tenemos el compromiso de ofrecer un servicio de calidad al país particularmente en esta región. Al presentar hoy el Proyecto Educativo Institucional, lo hacemos con la vocación de MAESTROS, y la esperanza que nace de creer que es posible un país fortalecido en la crisis y reconfigurado por la voluntad de sentido que como Nación todos estamos construyendo.
La finalidad del Proyecto Educativo es la formación integral, de los maestros y maestras de la Normal” y precisa que esta formación se ponga en evidencia en “la mejor calidad Ética y Pedagógica” de los maestros y maestras.
Sobre esta concepción se fundamenta el horizonte Institucional y justifica la adopción de un Modelo Pedagógico Socio - Humanístico Problematizante, que desarrolle procesos en permanente movimiento hacia la identificación, definición y comprensión de las situaciones problémicas, y búsqueda creativa de soluciones, toda vez que es situada, en tiempos, espacios, culturas y géneros determinados.[1]
[1] Una concepción del hombre “trascendente, dotado de cuerpo y espíritu, integrante de la sociedad con una cultura propia en condiciones de comunicarse y adquirir autonomía mediante la educación”. Esta definición, por su amplitud nos permite algunas precisiones necesarias a la hora de asumir la práctica educativa con personas no desde el punto de vista genérico” sino existencial.
La formación se da en la tensión permanente entre la individualidad y la masificación, lo particular y lo global, lo intrascendente y lo trascendente, constituyendo así el escenario en los que se sucede la historia de las personas y de los grupos.
Es urgente recuperar la verdad sobre el ser humano, la persona y su proyecto: es la prioridad. Recuperar el verdadero sentido de la Humanidad es el reto que se le al Estado, la Familia y la Escuela llamados a aportar a la reconstrucción del tejido social.
La educación, mediada por la escuela, asume la tarea de la formación de los niños y niñas, de los y las jóvenes asumiendo los valores: honestidad, respeto por la vida, justicia, igualdad, tolerancia, y solidaridad. En este sentido la educación procurará las herramientas del conocimiento, de la formación para la ciudadanía y del la responsabilidad con el medio ambiente necesarias para recuperar un lugar digno en la sociedad y activo en la historia.
El horizonte institucional de nuestro Proyecto Educativo, con referentes teóricos del orden Socio Humanístico Problematizante, asume la persona como centro de la formación; el enfoque Etnoeducativo la compromete en la dinámica permanente del reconocimiento y valoración de la cultura y la formación de los jóvenes maestros, nos reta a dar cuenta del cumplimiento de los Fines de la Educación en Colombia como lo señala la Constitución Colombiana.
“LA FORMACIÓN PEDAGÓGICA EN INTERACCIÓN CON LA COMUNIDAD, HACIA LA INTERCULTURALIDAD”, nombre del Proyecto Institucional, señala una finalidad en la que los factores constitutivos determinan una dinámica propia que constituye la razón de ser de la Escuela Normal Superior. Se trata de la educación a través de la acción directa en el ámbito de las comunidades pluriétnicas y multiculturales.
Tenemos el compromiso de ofrecer un servicio de calidad al país particularmente en esta región. Al presentar hoy el Proyecto Educativo Institucional, lo hacemos con la vocación de MAESTROS, y la esperanza que nace de creer que es posible un país fortalecido en la crisis y reconfigurado por la voluntad de sentido que como Nación todos estamos construyendo.
La finalidad del Proyecto Educativo es la formación integral, de los maestros y maestras de la Normal” y precisa que esta formación se ponga en evidencia en “la mejor calidad Ética y Pedagógica” de los maestros y maestras.
Sobre esta concepción se fundamenta el horizonte Institucional y justifica la adopción de un Modelo Pedagógico Socio - Humanístico Problematizante, que desarrolle procesos en permanente movimiento hacia la identificación, definición y comprensión de las situaciones problémicas, y búsqueda creativa de soluciones, toda vez que es situada, en tiempos, espacios, culturas y géneros determinados.[1]
[1] Una concepción del hombre “trascendente, dotado de cuerpo y espíritu, integrante de la sociedad con una cultura propia en condiciones de comunicarse y adquirir autonomía mediante la educación”. Esta definición, por su amplitud nos permite algunas precisiones necesarias a la hora de asumir la práctica educativa con personas no desde el punto de vista genérico” sino existencial.